domingo, 27 de mayo de 2012

Capítulo 11: Nunca más



CAPITULO 11: NUNCA MÁS


MIAMI, FLORIDA

HOSPITAL RONALD REAGAN MEMORIAL

En la sala de espera del área de urgencias, la familia Álvarez al completo aguarda noticias de don Eladio. Todos se encuentran muy nerviosos y preocupados por su estado de salud tras la severa crisis respiratoria sufrida en la fiesta de aniversario en el hotel.



Doctor: ¿Familiares de Don Eladio Álvarez, por favor?

Carlos: ¡Sí, nosotros! Yo soy su hijo mayor, Carlos Álvarez.

Doctor: Encantado, soy el doctor Herguedas, estoy al cargo del ingreso de su padre en este hospital. ¿Ustedes también son familiares de don Eladio? (Mirando a los demás)

Patrick: Sí, estamos todos muy preocupados por la salud de mi suegro.

Liliana: Por favor díganos como está mi padre. (Agarrada del brazo de Patrick, muy nerviosa)

Doctor: Bueno, este…

Claudia: ¡No ande con rodeos y hable claro, con un demonio!

Miguel: Mamá, por favor, cálmate y deja hablar al médico.

Claudia: ¿Cómo se encuentra mi marido? ¿Está bien? ¡Dígame que está bien!

Doctor: Su esposo ingresó con un cuadro respiratorio muy grave. Afortunadamente logramos estabilizarlo y ahora está fuera de peligro pero lamento comunicarles que… bueno… que…

Carlos: ¿Qué ocurre doctor? ¿No dice que mi padre ya se siente mejor?

Doctor: Sí pero las pruebas que le hemos hecho indican que el cáncer que padece ha avanzado mucho más rápido de lo que se esperaba.

Liliana: Ay diosito… no… no puede ser.

Miguel: Mi padre estuvo en tratamiento en Houston varios meses y bueno allá le dijeron que la enfermedad no tenía solución. (Triste)

Doctor: El cáncer se ha extendido por los pulmones y es imposible ya controlarlo. Es cuestión de un mes, dos…

Carlos: ¡No, mi padre no se puede morir! ¡No así! (Pegando un puñetazo contra una puerta del pasillo)

Doctor: Cálmese, por favor, siento mucho tener que ser yo quien les dé esta noticia pero es mejor que estén preparados para lo peor.

En ese momento suena el teléfono celular de Carlos, es Alicia que le llama desde su departamento. Carlos se aleja de su familia unos instantes para hablar con ella.



Carlos: ¿Aló?

Alicia: Carlos, mi amor. ¿Qué pasa? Sonia me dijo que tu padre estaba en el hospital.

Carlos: Hola cariño… (Triste) Qué bueno que me llamas… (Conteniendo las lágrimas)

Alicia: ¿Qué ocurre Carlos? Te noto quebrada la voz ¿Qué pasa? (Preocupada)

Carlos: Mi padre se va a morir, Alicia.

Alicia: ¿Qué? Pero eso no puede ser, tú me dijiste que en Houston…

Carlos: Acaban de decirnos que no hay solución, la crisis respiratoria de hoy ha sido por culpa de su enfermedad.

Alicia: Lo siento…

Carlos: Si mi padre se muere, yo no sé que voy a hacer, Alicia. (Rompiendo a llorar)

Alicia: No llores mi amor, por favor, no me gusta verte así. (Triste)

Carlos: (Llorando) Cuando regresamos de París tuve una fuerte discusión con él porque no te acepta y quiere que vuelva con Isabel… pero yo te amo y no puedo hacer lo que el quiere.

Alicia: Pero es tu padre, Carlos. Estoy segura que el te quiere mucho lo que pasa que… bueno que es normal que se molestara al enterarse de lo nuestro así de repente.

Carlos: Alicia, hay algo de lo que te quería hablar pero prefiero que sea en persona y no por teléfono. ¿Sí?

Alicia: ¿De qué se trata? (Sorprendida)

Carlos: Es mejor que lo hablemos en persona, en media hora estoy en tu casa ¿Ok? Después regresaré de nuevo al hospital para ver como sigue mi padre. Mi hermano Miguel se va a quedar con él esta noche.

Alicia: ¿Y tu madre, tu hermana y Patrick donde están?

Carlos: Están aquí todavía hablando con el médico pero supongo se marcharán a casa a descansar. Liliana y Patrick se marchan en unos días de regreso a Nueva York.

Alicia. OK, está bien. Aquí te espero y por favor anímate. No quiero que estés triste.

Carlos: Prométeme que nunca me vas a dejar, diga lo que diga mi familia, por favor.

Alicia: Te lo prometo.

Carlos: Te amo.

Alicia: Y yo a ti, te quiero mucho.



DEPARTAMENTO DE SONIA

En el salón de estar, Sonia, la amiga de Alicia, conversa con el hermano de ésta, Joaquín.



Sonia: ¿Pero qué dices? ¿Cómo así que Isabel está embarazada? ¡No puede ser cierto!

Joaquín: Yo estaba en la fiesta, precisamente vengo de allá. Yo era uno de los camareros y lo escuché perfectamente. Isabel está esperando un hijo. (Pensando: Y mío no es, porque yo si me cuidé con ella)

Sonia: ¡Alicia se va a morir cuando se entere de esto! Ay Dios mío, Dios mío… no me quiero ni imaginar lo que va a pensar de Carlos.

Joaquín: Ese es un desgraciado que sólo ha estado jugando con mi hermana durante todo este tiempo. Se lo dije a Alicia, que yo no estaba de acuerdo con esa relación.

Sonia: ¿No es mañana cuando llega tu padre de México?

Joaquín: Sí, mañana por la tarde. Ahora tu me dirás que le vamos a decir…

Sonia: Ay por favor… ¡Alicia tiene que saberlo pero ya! ¡Ya!

La joven Sonia sale corriendo de su departamento, que está justo enfrente del de Alicia y Joaquín. Ambos entran, mientras Alicia cuelga el teléfono después de hablar con Carlos.



Sonia: ¡Alicia! ¡Alicia, Carlos te está mintiendo!

Alicia: ¿Mintiendo de qué? ¿Se puede saber de que estás hablando?

Joaquín: Tenemos que hablar contigo, es muy serio lo que te tengo que decir.

Alicia: Mira Joaquín, si vas a seguir con lo mismo de siempre, que si Carlos no me conviene, que si…

Joaquín: Isabel está embarazada.

Alicia: ¿QUÉEEEEEEE?

En ese momento Alicia siente que el mundo se le viene encima, no puede creer lo que está escuchando.

Alicia: No… eso no puede ser… Eso te lo estás inventando.

Sonia: ¡Es verdad, Alicia! Tu hermano estaba de mesero en la fiesta de aniversario de los padres de Carlos y lo escuchó todo. Isabel lo anunció ante todos los invitados.

Joaquín: Al poco don Eladio tuvo una crisis y lo tuvieron que llevar al hospital en una ambulancia.

Alicia: No… Carlos no puede… no puede haber…

Sonia: Carlos te engañaba con su esposa, Alicia. Nunca la dejó.

Alicia: ¡SERÁ DESGRACIADO! Me ha estado viendo la cara de mensa todos estos meses… Mientras me juraba que me quería, estaba con ella… (Rompiendo a llorar, se sienta en el sofá. Sonia la acompaña)

Joaquín: Te lo dije, te dije que Carlos estaba jugando contigo.

Alicia: ¡YA BASTA! No quiero escuchar más sobre Carlos. Pero les juro que esto no se va a quedar así. Vaya que no, en cuanto entre por esa puerta me va a querer escuchar.

Sonia: ¿Qué piensas hacer?

Alicia: ¡Enfrentarlo para que me diga en mi cara toda la verdad!

Joaquín: Si quieres, podemos quedarnos contigo hasta que venga. Me gustaría decirle cuatro cosas bien dichas a ese sinvergüenza.

Alicia: No, ustedes se van al departamento de Sonia. Prefiero hablar a solas con él, esto es un asunto que sólo nos atañe a Carlos y a mí.

Sonia: Pero amiga…

Alicia: ¡Pero nada! ¡He dicho que lo voy a enfrentar sola y sola lo voy a hacer!



DEPARTAMENTO DE SAÚL

En la cama, acostados y semidesnudos, Isabel y Saúl charlan animadamente entre las sábanas después de haber hecho el amor. Saúl enciende un cigarrillo y comienza a fumar.



Isabel: Te dije que esto le iba a caer como una bomba a tu primo, jajaja.

Saúl: ¿Viste la cara que puso cuando dijiste que estabas embarazada?

Isabel: ¡Se quedó blanco!

Saúl: Jajajajaja.

Isabel: Pero todavía queda la otra parte del plan, recuerda.

Saúl: No te preocupes, mañana Carlos también odiará a Alicia para siempre. Ya vas a ver…


HOSPITAL RONALD REAGAN MEMORIAL


En una de las habitaciones del centro sanitario, don Eladio se encuentra descansando en la cama pero hay alguien más a su lado, su hija bastarda, Samantha. La explosiva rubia observa a su padre con odio y sed de venganza.



Eladio: ¡Samantha! ¿Qué haces tú acá?

Samantha: ¿Ah, pero que todavía no lo sabes? Uy, uy, uy… si hasta te falla la memoria…

Eladio: Te dije aquella vez que te incluiría en mi testamento (Tosiendo) Pero no quiero que mi familia sepa de ti, todavía, aún no es el momento.

Samantha: ¿Y cuando es el momento para ti? ¿Cuándo? Estoy harta de ser la hija bastarda, la abandonada, la que pudo tenerlo todo y no tuvo nada. Eres un miserable y un desgraciado. Pero te juro que me las vas a pagar.

Eladio: ¡Cálmate! (Tosiendo) ¡Mi esposa y mis hijos pueden venir en cualquier momento, es mejor que te vayas!

Samantha: ¡No me da la gana! Ahora me vas a escuchar tú a mí.

Eladio: Yo no podía abandonar a mi familia por una aventura, entiéndeme, por favor.

Samantha: ¿Ah no? A tú familia no pero a mi madre sí ¿Verdad? Te burlaste de ella, la dejaste embarazada y luego la botaste como a un perro viejo. ¡Cerdo!

Eladio: Eso no es verdad y lo sabes. Yo quise mucho a tu madre pero Claudia jamás me habría perdonado algo así y habría perdido a mis hijos.

Samantha: ¡Pero a mi no te importó perderme! ¡Eres un cínico y un desgraciado! Tú abandonaste a mi madre conmigo todavía en sus entrañas pero hoy me voy a cobrar tu desprecio para siempre...

La villana agarra una de las almohadas de la cama y se dispone a colocársela a Eladio en la cara.

Eladio: (Asustado) ¿Qué… qué vas a hacer con eso? ¡Samantha!

Y la malvada y maquiavélica Samantha le pone la almohada encima de la cara presionando con fuerza, intentando asfixiarle. Escuchamos música incidental.

Samantha: !Muere viejo maldito! !MUEREEE!

Don Eladio forcejea con Samantha tratando de zafarse de ella y salvar su vida pero la rubia presiona con más fuerza la almohada hasta que su padre deja de respirar. Don Eladio fallece ahogado por su propia hija. Samantha sonríe, retirando la almohada y colocándola de nuevo en su sitio.

Samantha: ¡Nos vemos en el infierno!



DEPARTAMENTO DE ALICIA

En el salón del estar del departamento de Alicia, la joven discute con Carlos acaloradamente tras descubrir el embarazo de Isabel.



Carlos: Por favor, déjame explicarte Alicia.

Alicia: Eres un cínico, un embustero. Yo preocupada por la salud de tu padre y resulta que me vengo a enterar por Sonia y por Joaquín de que tu mujercita está de encargo.

Carlos: Yo no se que te habrán dicho ellos pero tienes que saber como fueron las cosas. Yo estaba en la fiesta de aniversario e Isabel lo anunció delante de todo el mundo, incluso yo mismo no me lo podía creer.

Alicia: ¡Venga ya con el cuento de que no sabías nada, por favor! ¡Pero qué cara más dura tienes! ¿Eh? Lo tuyo no tiene nombre, eres un… un… (Rabiosa y llena de ira)

Carlos: ¡Haz el favor de tranquilizarte y escúchame! (Tomándola del brazo) Déjame que te explique.

Alicia: !Suéltame! (Se suelta de él) ¿Qué me vas a explicar, qué? Que mientras me jurabas amor eterno a mí.. !Se lo hacías a tu esposa! ¡Desgraciado!

La joven comienza a darle puñetazos en el pecho en un ataque de histeria, celos, rabia y dolor. Carlos trata de sujetarla con las manos.

Carlos: !Eso no es verdad y lo sabes! Isabel está embarazada de casi tres meses, por aquel entonces yo no te conocía. (La suelta, mientras ella se retira)

Alicia: Ya claro eso es lo que tú me dices, ¿Tú te crees que yo soy boba o qué? Mira, hazme el favor y te me pintas de colores de acá. No quiero que me hables, que me llames, que me busques, no quiero saber más nada de ti. Siento mucho lo de tu padre, pero tu y yo hemos terminado.

Carlos: Pero Alicia... razona y créeme. Te juro que te estoy diciendo la verdad.

Alicia: Lárgate de mi casa, no quiero volver a verte, no quiero volver a saber nada más de tí. ¿Entendiste? ¿O como te lo tengo que decir? ¿En chino? !Largo!

Él trata de acercarse y tomarla del brazo pero ella se revuelve y le suelta una sonora y fortísima cachetada. Escuchamos música incidental.

Carlos: (Tocándose la mejilla) !Está bien! !Está bien me voy! Pero te prometo que si salgo por esta puerta no volverás a verme nunca más en tu vida. ¿Me oyes? (Desafiante) ¡NUNCA MÁS!

En ese momento un silencio se apodera de toda la casa, Alicia le da la espalda rota de dolor, conteniendo el llanto. Al mismo tiempo Carlos, sin obtener respuesta y muy enojado, se marcha del departamento de Alicia dando un fuerte portazo que hace retumbar toda la estancia. Alicia se derrumba a llorar en el sofá.



CASA DE NIEVES

Son más de las doce de la noche. La jefa de cocina del hotel, Nieves, platica por teléfono con una desconocida voz femenina. Es Samantha quien la ha interrumpido el sueño para mortificarla.



Nieves: ¿Qué está diciendo? ¡No puede ser cierto!

Samantha: Así como lo oye…

Nieves: ¿Quién diablos es usted?

Samantha: Digamos que alguien que conoce toda la verdad acerca del pasado de “doña Claudia Gallardo”.

Nieves: No entiendo nada… ¿De qué pasado habla? ¿Qué es lo que sabe sobre doña Claudia?

Samantha: Esa mujer es una asesina, ella mató a mi madre y juro por Dios que lo va a pagar.

Nieves: Mire, si esto es una broma, no tiene ninguna gracia. Ahora mismo voy a llamar a la policía.

Samantha: ¡Cállese y déjeme hablar, vieja estúpida!

Nieves: ¿Se puede saber qué tengo yo que ver con ese supuesto crimen del que me está hablando? ¿Por qué me cuenta todo esto a mí?

Samantha: Porque necesito un alma inocente que sepa mi secreto…

Nieves: Está completamente loca… Adios…

Samantha: ¡No se atreva a colgar el teléfono! ¡Escúcheme bien cocinera de tamales! Lo sé todo sobre usted. TODO.

Nieves: (Nerviosa) ¿Ah sí? ¿Y se puede saber qué es lo que sabe?

Samantha: Usted, querida Nieves, es la madre biológica de Carlos Álvarez.

Nieves: ¿Cómo sabe eso? (Sorprendida)

Samantha: No importa como lo supe, el caso es que lo sé. Ahora ponga atención a lo que le voy a decir.

Nieves: ¿Qué es lo que quiere de mí? ¿Qué?

Samantha: Si no hace lo que le digo, voy a contar a todo el mundo que usted es la verdadera madre de Carlos.

Nieves: ¿Me está chantajeando?

Samantha: 10.000 dólares a cambio de mi silencio.

Nieves: Pero yo no tengo plata, soy una mujer humilde. ¿Dé donde voy a sacar yo tantísimo dinero? ¿Se ha vuelto loca?

Samantha: ¡Y a mí que me importa de dónde lo saque! Atraque un banco, pídale un préstamo a su adorado hijito Carlos… ¡Haga lo que le dé la gana vieja cacatúa! Si dentro de dos días no tengo ese dinero en mi poder, le juro que todo el mundo se enterará de que Carlos Álvarez es hijo de una inmigrante muerta de hambre.

Nieves: No, por favor, no me haga eso. Si doña Claudia se entera de que Carlos descubre la verdad…

Samantha: Sería capaz de matarla, sí… ¡Igual que mató a mi madre!

Nieves: Está bien, usted gana. Miraré la forma de conseguir ese dinero, pero no le prometo nada.

Samantha: Más le vale que lo tenga pronto… (Amenazante)

La pobre Nieves cuelga el teléfono muy nerviosa y asustada. La mujer corre hacia su recámara y abre uno de los cajones de la cómoda. Nieves saca un joyero y lo vuelca sobre la cama revolviendo entre las pocas joyas que tiene. Acto seguido abre otro cajón y saca un sobre con dinero, pero en ese momento una foto que estaba entre los billetes se cae al suelo. Es la imagen de un bebé, Carlos recién nacido. Nieves toma la foto y…

Nieves: Hijo… (Se le saltan las lágrimas) Hijo mío… cuanto te quiero… sólo Diosito santo lo sabe pero no puedo decirte la verdad. No puedo hijo. (Llorando con la foto en mano)



HOSPITAL RONALD REAGAN MEMORIAL

Miguel, el hermano de Carlos se dispone a entrar en la habitación de su padre ya que va a pasar la noche con él. Doña Claudia, Patrick y Liliana acaban de marcharse a descansar a la mansión. Miguel entra en la recámara y…



Miguel: Papá, mira lo que te traigo. Chocolate caliente para los dos y una baraja para jugar a las cart…

En ese instante Miguel ve a su padre tendido en la cama muerto, sin vida. Don Eladio no respira. El joven no puede creer lo que está viendo. Miguel deja caer los vasos de plástico al suelo.

Miguel: ¡Papá! ¡PAPÁAAA! (Acercándose a la cama) ¡Papá, contestame, papá! (Nervioso y angustiado, zarandeando a su padre)

Don Eladio no reacciona, lleva muerto más de media hora. Miguel comienza a gritar para pedir ayuda.

Miguel: ¡Enfermera! ¡ENFERMERA! (Saliendo a la puerta de la habitación) ¡UN MÉDICO POR FAVOR, DEPRISA!

Acto seguido un doctor y dos enfermeras aparecen por el pasillo corriendo y entrando en la habitación. Los profesionales examinan a don Eladio, mientras Miguel, desde la puerta les observa muy nervioso y presa de la angustia.

Miguel: ¿Qué le pasa a mi padre? ¡Doctor por favor haga algo!

Doctor: Lo siento joven… su padre acaba de fallecer.

Miguel: No… no… (Llorando) ¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!

CONTINUARA…

miércoles, 23 de mayo de 2012

Vuelve "Sigo Intentando", Pronto 2ª Temporada

SIGO INTENTANDO

Avances Segunda Temporada

Decepcionada y sin trabajo, Alicia regresa a México donde tratará de olvidar a Carlos, su gran amor. Trás la muerte de don Eladio y el embarazo de Isabel, Carlos continúa su vida con su esposa ya que Alicia no quiere volver a saber nada de él. El destino podría separar para siempre a nuestros protagonistas y es que en la vida de Alicia aparece alguien muy especial, alguien que le hará seguir adelante y olvidar... Mientras, la familia Álvarez se reune para conocer el testamento de don Eladio en el cual Carlos heredará una gran hacienda en México, muy cerca de Guadalajara, la ciudad natal de Alicia.
Reyli Barba es la voz en la nueva etapa de esta apasionante historia con el tema central "Te dejaré de amar". ¿Dejarán de amarse Alicia y Carlos?

SIGO INTENTANDO
Muy Pronto, Segunda Temporada
¿Te lo vas a perder?